Los Cabos, ¿el destino más caro de México?

Sí, Los Cabos es un destino de lujo, pero con alternativas que lo hacen tan caro como cada quien quiera.

Es decir, lo mismo cuenta con las marcas hoteleras de más alta gama que con pequeños establecimientos familiares.

Sobre todo, del lado de San José del Cabo, la cosa es más relajada, accesible y bohemia.

Aunque también es cierto que uno de los grandes atractivos es el buen ambiente de Cabo San Lucas.

Eso es lo que hace que estas dos pequeñas poblaciones formen un binomio perfecto llamado Los Cabos.

Los Cabos y su naturaleza

Cobijados por el mar, montaña y desierto, Los Cabos tienen en su belleza natural su mayor atractivo.

Son poblaciones dedicadas, casi por entero al turismo y a las actividades que con éste se relacionan.

Es uno de los cinco destinos más visitados del país. Y sin duda uno de los que atrae más extranjeros.

No cuenta con demasiados activos ni históricos ni culturales que puedan ser explotados.

Pero sí con un gran abanico de actividades enfocadas en el disfrute de sus paisajes.

Ideal para los amantes del turismo de naturaleza. Los que buscan romance, lujo o relax.

Como destino de playa, quizá le queda a deber un poco a los amantes del calor y las olas.

Pues, aunque goza de buen clima casi todo el año, no en todas las temporadas ni a lo largo de toda la costa es recomendable nadar.

Ni por la temperatura del agua que a veces refresca, ni por lo picado que en ocasiones se pone el mar.

Incluso me atrevería a decir que no es el destino de playa idóneo para venir con niños.

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Los Cabos, su infraestructura de lujo

En cuanto a infraestructura, posee buenos caminos, todavía seguros.

Sin embargo, no son ciudades precisamente amigables para quienes se desplazan en transporte o a pie.

Marinas, puertos y aeropuertos mantienen bien conectado al destino con el exterior, por todas las vías posibles.

Los Cabos y sus hoteles

En cuanto a su oferta hotelera, es amplia y de muy buen nivel.

Con una presencia las marcas de lujo de las cadenas internacionales.

Pero también cuenta con otras opciones gama media y hoteles independientes, familiares.

Su gastronomía está muy hecha al paladar extranjero, sobre todo, el estadounidense.

Sin embargo, están presentes en el menú, ese toque mexicano y esa frescura de los productos del mar.

Como ciudades no hay mucho que mostrar ni contar.

Realmente son asentamientos sobre el desierto, cuya principal arquitectura es la hotelera.

Si acaso San José del Cabo tiene algo más que ofrecer con su atmósfera bohemia de pueblito pintoresco.

La población mayoritariamente llegada de otras comunidades tampoco muestra mucha tradición o arraigo.

Es un destino que surgió, creció y sigue creciendo para y por los que aquí vienen a vacacionar.