Nuevo León, brilla con luz propia

Hace 10 años, el turista que visitaba Nuevo León lo hacía, principalmente, por negocios o para asistir a un congreso o convención. Hoy, la historia turística del estado es otra, igual de exitosa, pero más prometedora.

Y es que la labor que, en los últimos años, ha realizado Miguel Cantú González, director de la Corporación para el Desarrollo Turístico en la entidad, para atraer a Nuevo León turistas de placer y aumentar la ocupación hotelera ha sido, sin duda, tan extraordinaria como los atractivos naturales, culturales y gastronómicos del estado.

Tan solo, en lo que va del 2019, la ocupación promedio de Nuevo León es de entre 69 y 70%, impulsada por una mayor estadía de los visitantes.

Pero la llegada de más viajeros a los destinos de Nuevo León, también motiva una mayor inversión en el sector hotelero. Actualmente, hay en construcción alrededor de 2,400 habitaciones de diferentes categorías.

Atractivos extraordinarios en Nuevo León

Al crecimiento hotelero se han ido sumando nuevos productos y servicios turísticos que muestran a los visitantes no solo las bellezas naturales o la vasta oferta cultural, sino también, la profesionalización que hoy caracteriza a los prestadores de servicios de la entidad.

En los alrededores de Monterrey los viajeros pueden desde caminar por el bosque, observar aves y mariposas, practicar ciclismo de montaña, rappel, lanzarse desde un bungee y hasta deslizarse por una tirolesa.

Esta oferta naturalmente divertida se complementa con sus tres pueblos mágicos: Bustamante con sus espectaculares grutas. Santiago con sus escenarios naturales idóneo para la realización de actividades de aventura y team building. Linares con su arquitectura del siglo XVIII.