Los viajes astrales en Oaxaca no son para cualquiera
En Oaxaca se encuentra San José del Pacífico, un pequeño poblado que se ha convertido en el destino favorito de viajeros que buscan algo más que un viaje tradicional; desean una experiencia extrasensorial que los ayude a encontrarse espiritualmente.
Es el lugar perfecto –de acuerdo con los que han vivido la experiencia- para bajar el ajetreado ritmo y el estrés causados por la vida diaria, pero sobre todo para vivir un viaje astral. Ya sea por mera curiosidad o la sanación del espíritu, trotamundos de todos los rincones del mundo se dan cita para probar los hongos psilocibios.
Pero, ¿sabes cómo y en dónde inicia el viaje?
Es un ritual realizado por los zapotecas, desde la época prehispánica, para su auto conocimiento, la revelación y sanación. Los hongos fueron descubiertos por María Sabina, la chamana más popular de México que de acuerdo con ella, “los hongos alucinógenos son una herramienta espiritual para aquellos que desean limpiar su alma”.
¿Piensas emprender el viaje?
Este ritual tiene sus reglas, de no existir un proceso adecuado, con gente experta y que conozca la variedad de la especie que se está comiendo, se puede convertir en una mala experiencia. Así que pon atención para que puedas conseguir lo que tanto has estado buscando.
El viaje consiste en una experiencia de 4 días en un ambiente de tranquilidad como el que ofrece este pueblo.
¿Cuándo ir?
La temporada de hongos en Oaxaca, como todas las especies, corresponde con las lluvias, prácticamente de junio a octubre.
Algunas recomendaciones previas:
Unos días antes del viaje es necesario desintoxicarse, no consumir carne roja ni alcohol antes y durante el viaje. También un buen descanso es lo ideal.
Es necesario buscar a la persona correcta, ya sea un curandero o un yerbero de la zona, los mismos pobladores podrán recomendarte uno bueno. Es importante que hables previamente con gente de la comunidad pues ellos tienen un gran respeto por su tierra y costumbres.
Haz el viaje con personas de tu total confianza, no es bueno hacerlo con personas desconocidas.
¿En qué consisten los 4 días?
El primero, el curandero recibe al grupo de personas y se les da a conocer todos los requerimientos y el objetivo de esta aventura.
Luego viene el proceso de reconocimiento, definir rostros, gestos y sentimientos, para que el curandero conozca las tristezas, mal de ojo o alguna pérdida que tengan los participantes.
Una vez que se identificaron los problemas, el siguiente paso es el apoyo del sacerdote o chamán, incluso, el abuelo de la comunidad, quien es el más viejo y sabio puede ayudarte a sanar durante la travesía.
Un día antes de emprender el viaje, se realiza un baño de temazcal ceremonial para purificar el cuerpo, mente, alma y espíritu.
Llegado el día, la ceremonia comienza con un ritual llamado “fuego”, donde se le hace una ofrenda a los cuatro fuegos: de la alegría, de la tenacidad, madurez, sabiduría que los acompañarán en todo el proceso.
Los chamanes pintan un círculo en una entrada, para luego formar a los participantes en fila india. Mientras inician los cantos se preparan los hongos hasta que queden listos para consumir. Es recomendable comer de 4 a 8 para tener un buen viaje, todo dependerá de la guía y los consejos del sacerdote, hay a quienes sólo se les permiten dos.
Durante la odisea, el curandero siempre estará acompañando a los participantes, hasta que éste puede dialogar con su miedo y reconciliarse. Es un proceso que dura de 4 a 7 horas.
¿Quién puede hacer el viaje?
Cualquier persona es apta, lo importante es que tengan el conocimiento de este proceso y lo puedan convertir en un beneficio para ellos, pues el objetivo consiste en recuperar la estabilidad emocional como terapia.
Es importante saber que esta actividad no es meramente de recreación, hay que darle el valor y el respeto que merece esta tradición. Siempre mantenga presente que los hongos son una sustancia ilegal, controlada bajo las leyes mexicanas.
Tips
Antes de iniciar esta travesía en Oaxaca hay que hablar y pedir permiso a los jefes de la comunidad, pues ellos se rigen por sus propios usos y costumbres. Siempre hay que mostrar respeto y es importante que no trates de llevarte ningún hongo, pues los consideran sagrados y si te sorprenden, te castigarán con sus leyes.