Guadalajara, un deleite de sabor
La gastronomía de Guadalajara es una de las que reflejan de mejor manera el sabor de México. Tan completa como variada, se caracteriza por su apego a las tradiciones y recetas prehispánicas.
Sin embargo, la gastronomía de Guadalajara tiene la huella, obviamente, de los colonizadores españoles. Pero también de las minorías migrantes que llegaron a este territorio atraídos por su actividad comercial. Ejemplos de ello son las colonias de ingleses y franceses que han tenido destaca influencia en la vida y sabores de la ciudad.
Si pronto vas a viajar o quieres aconsejarle a alguien lo que debe probar, estos son los platillos típicos que debes considerar de la gastronomía de Guadalajara.
1. Torta ahogada
La torta ahogada es sin duda el más grande símbolo de la gastronomía de Guadalajara. Manjar que solo puede ser preparado como se debe en esta ciudad.
Y esto es porque su elaboración depende de un ingrediente fundamental, prácticamente endémico: el birote salado. Parece que únicamente en la gastronomía de Guadalajara es posible encontrar el birote salado con todas las propiedades.
Es una pieza de pan con una corteza crujiente y un interior blando, así como un sabor ligeramente agrio. Además de dicho elemento, la torta ahogada depende de otros dos ingredientes esenciales: las carnitas de cerdo y las salsas.
Retadoramente picosas, éstas últimas se han ido domesticando para hacer accesible este platillo de la gastronomía de Guadalajara a más paladares. Incluso, algunos han optado por cambiar las carnitas por camarones, panela o pollo y así crear combinaciones nuevas.
En cualquiera de los casos, suelen ir acompañadas de limón y cebolla desflemada. Es costumbre pedir la torta como “media” o “completa”, según la cantidad de salsa con que serán bañadas. Muchos atribuyen el crédito de creación a Luis de la Torre, “El Güero”.
Se dice que al llegar hambriento después del trabajo, buscó con qué saciar su hambre. Así que tomó lo que tenía a la mano: pan, frijoles machucados, carnitas y salsa de jitomate aguada. Juntó los ingredientes y preparó una rara comida que hoy es un clásico de la gastronomía tapatía.
2. Birria
La birria es otro de los platillos representativos de la gastronomía de Guadalajara. Originalmente se preparaba con carne de chivo, pero ya existen variantes con borrego, res, ternera, cerdo, carpa y bagre.
Se cuenta que su origen se debe a una importante sobrepoblación de chivos, en este territorio, en la época de la Colonia.
Los españoles optaron por regalar chivos a los nativos, con la mala intención de molestarlos con su carne dura y olorosa.
Sin sospechar que ellos convertirían este menospreciado insumo en un manjar tradicional de la gastronomía de Guadalajara.
La carne es cocida al vapor y tatemarla en un horno o un fogón, para después bañarla en una salsa muy condimentada. Sin duda la birria es, por ello, uno de los platos más representativos de la gastronomía de Guadalajara.
3. Carne en su jugo
Mucho menos famoso que las tortas ahogadas, la carne en su jugo es un imperdible de la gastronomía de Guadalajara.
El plato lleva tocino frito en una olla, a la que después se le añade carne de res. También forman parte de esto el tomate verde molido y jitomates molidos con poca agua.
El objetivo es cocer la carne a fuego lento para que ésta suelte su jugo; de ahí proviene su nombre. Muchos le agregan frijoles y lo acompañan con cilantro, cebolla y, por supuesto, una buena salsa.
Esta creación de la gastronomía de Guadalajara se le adjudica al restaurante “De La Torre”. Establecimiento que comenzó a comercializar este platillo en 1958 y que hasta hoy es un representante de la gastronomía tapatía.
Hasta hoy día se sigue sirviendo en platos de barro que no son planos ni hondos. Tienen una forma ovalada y una pequeña barrera que contiene el caldo que cubre la carne. Las variantes empiezan a hacerse presentes en este gran clásico de la gastronomía de Guadalajara. Sin embargo, en cualquiera de sus presentaciones, seguro será un deleite para propios y extraños.
4. Lonches
Lo que en la Ciudad de México sería una torta, en la gastronomía de Guadalajara lleva por nombre lonche. Es decir, grosso modo, un pan relleno con las más diversos, ingredientes, hasta donde la imaginación permita llegar.
Desde frijoles o queso, hasta verdaderos rascacielos que combinan carnes y verduras entre dos tapas de pan. La variante tapatía es, en todo caso, el pan. Y es que se usa nuevamente el birote salado, orgullo regional.
Desde esta óptica, los lonches son como una torta ahogada, sin ahogar. Es decir, sin el baño de salsa final. Ahora bien, atendiendo al relleno, tampoco son carnitas lo más común en la gastronomía de Guadalajara. La tradición dicta que los más famosos lonches son de pierna adobada, un verdadero manjar.
5. Pozole al estilo tapatío
El pozole es uno de los platillos más típicos de México que, en Guadalajara, tiene un lugar y un sabor especial.
Y es que una de las cualidades del pozole en la Perla Tapatía es el tono rojizo que adquiere. Esto, debido al chile que se le agrega al caldillo, otra variable importante. Pues el pozole tapatío suele ser más caldoso.
El maíz y la carne siguen teniendo un papel central en esta receta que es de las más socorridas en las fiestas patrias. Ideal también para los tiempos fríos de Navidad y las posadas, así como en cualquier merienda familiar.
Un plato sencillo que se sirve con lechuga, rábano, limón y a veces, cebolla, así como un poco de orégano. Se acompaña de unas deliciosas y crujientes tostadas, solas o con algún otro guiso especial.
6. Jericallas
Las jericallas son el créme Brûlée de la gastronomía de Guadalajara. El postre típico que acompaña las comidas de los tapatíos casi por default.
Esta creación de la gastronomía de Guadalajara se dio de manera accidental a principios del Siglo XIX. Cuentan que una monja del Hospicio Cabañas preparó un postre rico en proteínas y calcio para los niños huérfanos. Esta monja era de Jérica, España; de ahí el nombre de esta delicia.
Similar, también, al flan, es un postre hecho a base de leche, que se ha vuelto muy popular. Se le puede encontrar como antojito en un puesto en la calle o en los restaurantes de alta gama. Como sea, es un verdadero imperdible de la gastronomía de Guadalajara.
7. Tequila
Símbolo nacional de México y orgullo de Jalisco, el tequila es la bebida típica de la gastronomía de Guadalajara.
Es un destilado de agave, con denominación de origen, elaborado desde el siglo XVII, que ha adquirido fama mundial.
Su nombre viene de la población de origen, el Pueblo Mágico de Tequila, cercano a Guadalajara. Hay un tequila para todos los gustos: joven, blanco, reposado o añejo.
Se puede consumir solo o algunos de los cocteles que le han dado fama, como las margaritas. Podrás encontrarlo en restaurantes y bares de la capital jalisciense.
8. Tejuino
El tejuino es una bebida de origen prehispánico, realmente popular en la gastronomía de Guadalajara. Se elabora con masa de nixtamal y piloncillo para dejarlo fermentar en una olla de barro.
Es preparado con una base de jugo de limón y sal. Se vierte el tejuino y se pasa una y otra vez del vaso al cucharón. Finalmente se coloca nieve de limón por un costado, lo que resalta su carácter refrescante.
Hay quien dice que su nombre es náhuatl y proviene de la palabra ‘tecuin’, que significa latir. Esta bebida de la gastronomía de Guadalajara es considerada como “La bebida de los dioses”.
Se encuentra, principalmente, en carritos que cargan enormes ollas en las calles de Guadalajara. Asimismo en tianguis, mercados y algunos restaurantes. Es una bebida muy típica en la gastronomía de Guadalajara.
