Cómo ligarte un italiano en Roma

Roma, Italia, es una ciudad de romance y sensualidad, donde el amor se respira en cada rincón de sus espectaculares plazas, sus encantadores jardines o sus ruinas milenarias. Desde pasear en una Vespa en compañía de Cary Grant o vivir la dolce vita como Anita Ekberg en la Fuente de Trevi, Roma promete muchas aventuras y aún más suspiros.

En palabras de Elizabeth Gilbert: “A mi gusto, los hombres romanos son tan hermosos como las mujeres francesas. Es decir, no omiten ningún detalle en su búsqueda de la perfección […] A veces se ven también que les quiero aplaudir”.  

Es por eso que aquí te decimos cómo robarle el corazón al italiano de tus sueños.

1. Elige los lugares adecuados

Hospedaje: Como todas las grandes ciudades europeas, Roma tiene una muy amplia variedad de opciones de hospedaje, como el Appia Antica Resort, el Portrait Roma o el Dejo Rome. Sin embargo, la mejor opción para conocer gente es también beneficiosa para tu bolsillo: los hostales.

Con todo y la mala reputación de los hostales (de chinches a asesinos de película), la realidad es que son un muy buen lugar para quedarse, hacer amigos y no gastar de más. Tienen áreas comunes en las que es sencillo entablar una conversación y usualmente un bar, donde se reúne gente de todo el mundo. The Beehive, Blue Hostel, Campanella 3, B&B La Duchessa Roma, Dreaming Rome, Wiki & Green Hostel y The Yellow son muy buenas alternativas.

Restaurantes: En Roma abundan acogedoras cafeterías y trattorias, terrazas y cafés al aire libre tan románticos que parece salidos de un chick flick. Practica el deporte nacional y siéntate a ver gente pasar con un buen plato de pasta o un rico coctel.  Si no tienes suerte de conocer al amor de tu vida, al menos podrás darte un buen taco de ojo. Te recomendamos The Public House, Bootleg, Lungo Il Tevere Roma,  Etabli y Caffe Greco, The British Corner.

Vida nocturna: Tras la puesta del sol Roma se transforma. Hay cientos de opciones para salir a cenar o tomar una copa, como Bacab Shop Bar, La Botticella, The Yellow o Gregory’s. Si lo que quieres es conocer a alguien para tener una conversación decente, te recomendamos buscar lugares tranquilos e íntimos. Considera que, al igual que en México, los antros no siempre son una buena opción, especialmente si vas sola. Ten en cuenta que en la capital romana, la vida nocturna empieza tarde, un poco como en nuestro país.

Atracciones: Roma es una ciudad fundamentalmente turística, por lo que tiene varios lugares alrededor de los cuales se mezclan turistas y locales. Por más cliché que suene, la Fuente de Trevi es un buen lugar para empezar. Dejando de lado las enormes masas de gente que tienden a juntarse ahí, es uno de los lugares más románticos de la ciudad. Y, nunca se sabe, en una de esas se cumple tu deseo de conocer al hombre de tu vida.  Date una vuelta también por la Plaza de España y siéntate en sus escaleras como Audrey Hepburn, pasea por la preciosa Villa Borguese, y recorre la Plaza Navona.

2. Participa en actividades y eventos

Una gran opción para conocer gente nueva es participar en actividades grupales. Desde los varios tours que exploran la ciudad a pie (Walking Tours) hasta los recorridos de bares por la noche (Colosseum Pub Crawl) y las catas de vino (checa el Wine and Food Tasting Roscioli), en ellas podrás hacer algo que te gusta y compartir la experiencia con gente de todo el mundo.

Otra alternativa es participar en los eventos de Couchsurfing, organizados para ayudar a los turistas de visita en Roma. Los hay de todos tipos, desde cenas y fiestas, hasta encuentros para platicar idiomas; suelen participar tanto locales como extranjeros.

3. Entiende cómo es su cultura

En su gran mayoría, los hombres italianos son bastante más directos –y ruidosos– que en otros países de Europa. “Ciao Bella” es una frase que escucharás bastante seguido al caminar por la calle. Y, aunque puede llegar a ser molesto, en general no se hace con mala intención. No es raro tampoco que se acerquen a platicar contigo o te inviten a sentarte con ellos si estás sola, especialmente en lugares muy turísticos. Si no te interesa, usualmente un “no” basta para recuperar tu paz.

Un consejo para disfrutar de Roma al máximo es atreverse a vivir la aventura y a tener nuevas experiencias. Eso sí, nunca te pongas en peligro. Aunque es una ciudad relativamente segura, viajar hacia al atardecer a bordo de la Vespa de un completo extraño tiene sus riesgos.

4. Vístete para matar, sin dejar de lado la comodidad

Italia, y por ende los italianos, dan gran importancia a la apariencia, y en ocasiones, el “look turista” puede sentirse casi como una ofensa a la cultura. Esto no significa que debas vestirte de gala o gastar enormes cantidades de dinero en ropa, sino simplemente vestir para verte bien y estar cómoda (¿Quién quiere caminar sobre calles medievales empedradas con stilettos?)

Si no te importa gastar para verte fantástica, nada como la Vía del Corso, en donde se encuentran todo tipo de marcas como Prada, Versace, Gucci o Chanel. Si quieres algo más casual, Cola di Rienzo, cerca del Vaticano, tiene un colorido mercado y varias boutiques alternativas, y la Viale Marconi tiene la mayor concentración de tiendas a precios convenientes. Para una onda más vintage, la Via dei Giubbonari es un paraíso, mientras que para antigüedades más clásicas, la Vía Margutta lo tiene todo. Ten en cuenta que muchas tiendas cierran en algún momento entre la 13:00 y las 15:00 para la hora de la comida, pero abren de nuevo por la tarde.

5. Aprende un poco de italiano

Es bien sabido que el italiano es uno de los idiomas más románticos del mundo. Y, aunque no tienes que hablarlo a la perfección, saber un par de frases básicas es de gran ayuda. Aquí te dejamos algunas líneas que conquistan a cualquiera:

• Voglio imparare l’Italiano: Quiero aprender italiano
• Ho trascorso una splendida giornata con te: Me la he pasado muy bien (contigo) hoy.
• Dammi un baci: Dame un beso
• Hai rotto il fiato: Me quitaste el aliento
• Sei il ragazzo più bello che abbia mai visto: Eres el hombre más bello que he visto.
• Eri un bellissimo spreco di tempo: Eres un bellísimo desperdicio de tiempo. Esta frase es muy práctica para despedirte de un amor veraniego.

Y, si las cosas no están saliendo del todo bien…

• Vaffanculo: esta útil palabra, aunque no demasiado cortés, es algo así como ¡maldita sea! Muy útil para alejar compañías indeseables. 

Esperamos que esta guía les sea útil para su próxima visita a la bella Roma.