10 experiencias únicas que vivir en Japón

Japón está en la lista de deseos de muchos viajeros mexicanos, al ser un destino que ofrece infinidad de sitios extraordinarios, sabores sorprendentes y maravillas naturales. Por ello, en esta ocasión te vamos a contar de diez experiencias únicas que vivir en Japón para hacer del viaje de tus pasajeros, una aventura única en la vida.

Visitar los sitios más icónicos de Tokio

Puerta de entrada a las maravillas de Japón, Tokio es el destino ideal para quien busca experimentar el contraste entre lo antiguo y lo moderno. Mientras que la ciudad cuenta con atractivos que hablan de su fascinante pasado -como el Santuario Meiji, el Palacio Imperial y el templo Senso-ji- también cuenta con lugares ideales para descubrir su lado más moderno –como el barrio de Ginza o el Tokyo Skytree-. A la vez, la capital japonesa es conocida por su gran variedad de restaurantes galardonados, sus espectaculares distritos comerciales, sus parques temáticos y sus espacios de entretenimiento.

Descubrir la belleza natural de Hakone

Hakone, a aproximadamente 100 kilómetros de Tokio, es una ciudad montañosa conocida por sus onsen, su valle de Owakudani –famoso por sus manantiales humeantes de azufre- y por su espléndido lago Ashi, con espectaculares vistas al monte Fuji. Aquí, sus experiencias obligadas son tomar un paseo en barco por el lago, visitar su santuario Shinto, conocer el santuario Hakone-jinja y sorprenderse con el Hakone Sekisho Ato, una reproducción de un puesto de control del Periodo Edo.

Viajar en Tren Bala

Indudablemente una de las experiencias únicas que vivir en Japón es viajar en sus legendarios trenes bala, uno de los grandes orgullos nacionales. La extensa red de Japan Rail cuenta con nueve rutas, que permiten a los viajeros trasladarse de forma cómoda, sencilla y sobre todo, rápida, al alcanzar una velocidad de hasta 320 kilómetros por hora. Por ejemplo, la ruta entre Tokio y Kioto toma menos de dos horas y media.

Ver a los encantadores venados de Nara

A menos de una hora de Kioto, Nara es un destino que recibe a sus visitantes con templos antiguos, árboles de cerezo, hermosos jardines y sitios de peregrinación. De sus muchas experiencias, sin embargo, la más emblemática es visitar Nara Park, a pies del monte Wakakusa, hogar de más de 1000 pacíficos venados y un hermoso lago lleno de carpas y tortugas. Muy cerca del parque, se encuentran el Templo Todai-ji, que alberga una estatua colosal de Buda, la más grande del mundo con 300 toneladas de peso; y la pagoda de cinco pisos Kofukuji, una de las más altas de su tipo en Japón.

Recorrer el Fushimi Inari-taisha

Uno de las postales más emblemáticas de Kioto, el Fushimi Inari-Taisha es un santuario Inari más importante de Japón y está dedicado a la deidad de las buenas cosechas y el éxito en los negocios. Es conocido por su arco de puertas torii de color naranja y que bordea el camino hacia el monte Inari. Además de recorrer este singular paseo, es posible realizar una ruta de senderismo para explorar la montaña, probar la galleta de la fortuna original y degustar la gastronomía local.

Pasear por el bosque de bambú de Arashiyama

Otra escapada obligada desde Kioto es al bosque de bambú de Arashiyama, en Sagano, donde los viajeros podrán pasear por los caminos del bosque con la luz del sol filtrándose entre los árboles. Para complementar la experiencia, hay que visitar la villa de Okochi-Sanso, en la parte superior del bosque, con bellos jardines y espectaculares vistas de la ciudad. Cerca de allí se encuentra el santuario Nonomiya, venerado en todo el país para asegurar buenos matrimonios y partos seguros; así como varias tiendas dedicadas a la artesanía de bambú.

Hacer un recorrido culinario por el mercado Omicho

Japón es indudablemente un destino ideal para los viajeros amantes de la buena mesa, con todo desde restaurantes galardonados hasta especialidades locales con cientos de años de tradición. De las muchas experiencias que ofrece el país, una de las más locales y auténticas es visitar el mercado Omicho, en Kanazawa. Ha sido uno de los mercados especializados en productos de mar más importantes de la región por más de tres siglos, al recibir pescados y mariscos frescos todos los días. Cuenta con más de 170 puestos y tiendas, que desde muy temprano, ofrecen todo desde frutos del mar hasta conservas, sake y dulces. Además, cuenta con varios sitios para comer sus delicias preparadas de modo experto, como el afamado pescado nodoguro o el kaisedon (sashimi sobre arroz).

Experimentar el lado más tradicional de Japón en Takayama

Takayama, en la prefectura de Gifu, es la visita ideal para quien quiera conocer más acerca del Japón de antaño, pues ofrece arquitectura tradicional, coloridos festivales y algunos de los mejores onsen del país. A la vez, es un estupendo punto de partida para explorar los emblemáticos Alpes Japoneses, un auténtico edén para practicar senderismo y deportes de nieve. Entre los atractivos principales de Takayama están sus festivales de primavera y otoño, el distrito de Sanmachi –con tiendas de artesanía, fábricas de sake y restaurantes locales-, los mercados matinales y los cercanos pueblos de Hida y Shirakawa-go.

Hospedarse en un ryokan

La oferta hotelera de Japón tiene algo para todos los gustos y presupuestos, y sin embargo, hay un alojamiento que todos los viajeros deben experimentar al menos una noche: un ryokan o posada japonesa. Provenientes de la época de los Daimyos, ofrecen amplias habitaciones con el suelo recubierto de “tatami” de paja de arroz, una mesa baja, un futón y puertas corredizas. Durante la estancia, se espera que los huéspedes sigan algunas reglas de hospitalidad, como quitarse los zapatos al entrar y bañarse en tinas japonesas. En muchos casos, se ofrecen platillos preparados con productos locales. Un detalle importante es que muchas de estas posadas están construidas cerca de fuentes termales, por lo que también ofrecen una experiencia de wellness.

Divertirse con el gran ambiente de Osaka

Para quien busca una estancia divertida, relajada y sin pretensiones, Osaka es indudablemente una grandiosa elección. A pesar de que es conocida especialmente por su gastronomía, su vida nocturna y su gran ambiente, también tiene un lado mucho más tradicional, con atractivos como el famoso Castillo de Osaka y sus jardines con árboles de cerezo. Algunos de los imperdibles de Osaka son el Puente Dotonbori y el barrio de Minami –famosos por sus carteles luminosos-, sus festivales de temporada y los barrios gastronómicos de Tenma o Ura Namba.

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