México
¿Nuevo Toledo? ¿Existe la ciudad de Club de Cuervos?
¿Quién no recuerda aquella escena en la que Isabel Iglesias se sienta en la plaza principal de Nuevo Toledo a comerse, desesperadamente, un elote para liberar el estrés que le provoca el trabajo y su querido y rival hermano, Chava Iglesias?
Isabel y Chava Iglesias, dueños de Los Cuervos de Nuevo Toledo.
Aquella singular imagen de Club de Cuervos, dejó ver un cachito de las tradiciones de Tepotzotlán. Sí, este pueblo mágico del Estado de México, que se camufló de Nuevo Toledo, en la serie original de Netflix.
Si bien, Tepotzotlán, no es un poblado, como Nuevo Toledo, donde la gente, economía y gobierno tengan sus esperanzas puestas en el futbol, si es un rincón cargado de magia, tradición y arte virreinal.
Dónde está Nuevo Toledo
El ficticio poblado de Nuevo Toledo, es, realmente, Tepotzotlán, un pueblo mágico mexiquense ubicado a una hora y 20 minutos de la Ciudad de México.
Aunque a lo largo de sus cuatro temporadas, Club de Cuervos, ha utilizado varias locaciones, también, en Puebla y Pachuca; Tepotzotlán es uno de esos rincones del país que por su cercanía con la capital mexicana convoca a escaparse un fin de semana y recrear diversos episodios de Club de Cuervos.
Chava Iglesias, presidente del Club de Cuervos de Nuevo Toledo, junto con sus asistente Hugo Sánchez.
Esta serie producida por Netflix, trata sobre el conflicto de los hermanos Iglesias, Chava e Isabel, quienes, tras morir su padre, luchan por liderar el equipo de futbol, que, por cierto, está en riesgo de permanecer en la Primera División.
Cómo llegar a Tepotzotlán
Nuevo Toledo o Tepotzotlán, se localiza a menos de una hora y media de la CDMX.
Si viajas desde la Ciudad de México en auto, debes toma la autopista México-Querétaro hasta pasar Cuautitlán Izcalli. Antes de la caseta de cobro, debes desviarte a la derecha y seguir los señalamientos para subir un puente que atraviesa la autopista.
La ventaja del pueblo de Los Cuervos de Nuevo Toledo, es que está muy bien conectado. Si decides irte en autobús en la Terminal Poniente de la capital del país salen corridas diariamente a Tepotzotlán.
Atractivos imperdibles
El Templo de San Francisco Javier es la joya arquitectónica de Nuevo Toledo o Tepotzotlán.
Solo bastarán unos minutos en la plaza principal de Nuevo Toledo, esa en la Isabel Iglesias se atraganta con un elote, para recordar esa escena. O aquella donde Hugo Sánchez está buscando a Chava Iglesias.
Y justo desde este punto de Nuevo Toledo o Tepotzotlán, como quieras llamarlo, se ve la imponente torre virreinal del Templo de San Francisco Javier.
De hecho, por su fachada de cantera blanca, muchos la llaman la joya más refulgente de la corona del arte churrigueresco mexicano.
Pero no solo este templo te robará el aliento, sino todo el conjunto arquitectónico que durante dos siglos y medio albergó el excolegio Noviciado de San Francisco Javier. Este complejo de Nuevo Toledo o Tepotzotlán fue construido por frailes jesuitas y hoy es sede del Museo Nacional del Virreinato.
El Templo de San Francisco Javier sorprende con sus retablos.
Ahí, yace obras de arte de los siglos XVI, XVII y XVIII. Además se exhiben piezas de Juan Correa, Martín de Vos, Miguel Cabrera, así como 20 pinturas del artista novohispano Cristóbal de Villalpando.
Además, cuenta con una biblioteca histórica con más de 4,000 ejemplares que incluyen algunos incunables.
En sus jardines, también destaca la fuente original del llamado Salto del Agua, la cual remataba el viejo acueducto que nacía en Chapultepec.
Otra de las joyas del conjunto conventual y de Nuevo Toledo, bueno de Tepotzotlán, es el Templo de San Pedro Apóstol, con su fachada atrial neoclásica con escudo papal. Sus retablos de estilo barroco, que te sorprenderán, fueron pintados por Miguel Cabrera y tallados por Higinio Chávez.
Este pueblo mágico, llamado en la serie Nuevo Toledo, cautiva con sus coloridas artesanías.
Pero Nuevo Toledo o Tepotzotlán, es más que su arquitectura virreinal, es un pequeño pueblo que te invita a recorrerlo a pie y perderte por sus angostas calles empedradas para admirar sus coloridas casas y visitar sus portales repletos de tiendas de artesanías.
Por las noches, anímate a hacer un recorrido de leyendas y descubrir algunos de los secretos de este pueblo mágico que algunos llaman Nuevo Toledo y otros Tepotzotlán.
Descubre qué y dónde comer
Desde la terraza del restaurante Casa Mago se tiene una de las mejores vistas de Nuevo Toledo.
Dicen que en Nuevo Toledo el día comienza con un delicioso desayuno en el Mercado Municipal. Sus antojitos mexicanos como quesadillas, sopes y tlacoyos, todos de masa azul te harán olvidarte, fácilmente, de la dieta.
A esa oferta se suma su cocina típica como el arroz verde, los chiles tolucos, guisos con chapulines y, en temporada, los famosos y suculentos escamoles.
Los fines de semana podrás disfrutar de increíbles buffet que combinan especialidades locales con platillos internacionales.
La comida típica, también es parte de los atractivos de Tepotzotlán o Nuevo Toledo.
Si esta opción se te antojo, visita los restaurantes Los Virreyes con una encantadora terraza, El Mesón del Molino con buffets temáticos y Casa Mago con incomparables vistas del Templo de San Francisco Javier.
Seguramente, tanto Isabel Iglesias como Chava Iglesias y muchos de los jugadores del Club de Cuervos de Nuevo Toledo se escaparon durante las filmaciones a estos deliciosos lugares.
La pasión por Los cuervos de Nuevo Toledo hizo vibrar a los mexiquenses.
Claro que, si aún te queda un huequito, lánzate a la plaza principal y atrévete a comerte un elote como Isabel Iglesias o si prefieres pide unos esquites. También podrás probar los famosos chicharrones preparados, las espectaculares espiropapas y muchos, pero muchos dulces típicos.
Después de conocer los atractivos imperdibles y comida típica de Nuevo Toledo o Tepotzotlán, te sobrarán razones para escaparte a este pueblo mágico del Estado de México.
Los alrededores de Nuevo Toledo
Un fin de semana en Nuevo Toledo se complementa con una visita a Arcos del Sitio.
Uno de los lugares que tampoco te puedes perder es Arcos del Sitio. Este fabuloso rincón se localiza a 29 kilómetros de Tepotzotlán o Nuevo Toledo. Sobresale por ser considerado una de las grandes obras hidráulicas del siglo XVIII.
Y es que hace tres siglos, cuando los jesuitas construyeron el Acueducto de Xalpa para llevar agua del río del Oro, que nace en el monte del Pinal, hasta su hacienda, nunca imaginaron que aquella obra hidráulica sería considerada una de las más importantes del mundo y que 300 años después de su edificación se convertiría en un atractivo único de la región.
Sus 43 arcos repartidos en cuatro niveles, que se alzan 61 metros y se extienden por 438 metros aproximadamente, forman una mágica postal.
Esta arquería, levantada por órdenes de los padres Pedro Berinstáin, Pedro Sobrino y Santiago Castaño que quedó inconclusa debido a la expulsión de los jesuitas en 1776. Casi un siglo después, Manuel Romero de Terreros, tercer conde de Regla, la concluyó.
En Arcos del Sitios es posible caminar por el imponente acueducto.
Aquí podrás caminar por los arcos o sobre ellos, justo donde antes corría el agua. Otra alternativa es dar un paseo a caballo en las inmediaciones de aquella obra arquitectónica hidráulica.
Si vas acompañado de otros fans de Club de Cuervos pueden pasar un divertido día de campo. También está la opción de aventarse de la tirolesa. Si no le temen al frío, nadar en la alberca que mira, de lejos, el Acueducto.
O si prefieren solo pueden caminar por las interminables áreas verdes y volar un papalote. O internarse por la zona montañosa, mientras surcan algunos de los puentes colgantes.
Ahora que ya conoces los atractivos imperdibles y la deliciosa comida de Tepotzotlán, ¿que esperas para recrear algunas escenas de Club de Cuervos en el pintoresco poblado de Nuevo Toledo?