10 razones para celebrar a México
10 razones para celebrar a México
México es uno de los países más extraordinarios del mundo. Diverso, rico, colorido y con sabor único, es un destino que te espera con los brazos abiertos. De sus ciudades que nunca duermen a sus playas turquesa y sus pueblos mágicos, cada rincón del país tiene algo sorprendente y único. Aquí te damos 10 razones para conocer y celebrar a México.
10 razones para conocer México
1. Por sus colores
México es un país de color, del turquesa de sus mares y el dorado de sus desiertos a los arcoíris de sus textiles, los naranjas de sus atardeceres, los amarillos de sus iglesias y los rojos de sus chiles. Es un lugar mágico en el que donde sea que mires, hay un abanico de tonalidades y sensaciones únicas.
Hay muchos sitios donde se puede vivir el color al máximo, como Las Coloradas, cerca de Mérida; la laguna de Bacalar, en Quintana Roo; las lagunas de Montebello, en Chiapas; Hierve el Agua, en Oaxaca; y Tlaquepaque, en Guadalajara. Aunque vamos, sólo basta visitar un mercado en cualquier parte del país para vivir la experiencia.
2. Por sus ciudades que nunca duermen
México tiene todo tipo de ciudades, desde la moderna capital, que tiene un curioso balance entre lo moderno y lo tradicional, hasta Monterrey, donde lo urbano y lo natural conviven; Oaxaca, donde el pasado se vive a cada paso; o Guanajuato, un maravilloso conjunto de callejones y construcciones coloniales.
Y ni se diga de Puebla, la ciudad de las iglesias; Tijuana, un mosaico de culturas; Mérida, de casonas blancas y arboledas; y Morelia, cuyo centro histórico es Patrimonio de la Humanidad.
3. Por la magia de sus pueblos, de las mejores razones para conocer México
México tiene más de 120 Pueblos Mágicos, destinos con gran riqueza natural y cultural, y grandes atractivos. Cada uno tiene una personalidad única e inolvidable, que cautiva a los viajeros a cada paso.
Los hay de todo tipo: de mar, como Tulum, con su encanto caribeño; de laguna, como Bacalar, que te espera con siete colores e historias de piratas; de bosque, como el hermoso Arteaga; urbanos, como San Miguel de Allende con su preciosa iglesia; de sierra, como Cuetzalan, con su niebla y su aroma a café; y hasta de desierto, como Candela, Coahuila.
Hay, también, muchos Pueblos Mágicos que ofrecen experiencias únicas, como recorridos por viñedos (Parras y Tequisquiapan), ecoturismo y deportes extremos (Valle de Bravo, y Peña de Bernal), maravillas naturales (Cuatro Ciénagas y Creel) y hasta sitios arqueológicos (Palenque y San Juan Teotihuacán).
4. Por sus íconos
México es un país de símbolos, por lo que no es de extrañar que a lo largo y ancho del territorio haya algunos íconos especialmente representativos. Cada ciudad y población tiene su propio símbolo, como son el Ángel de la Independencia y el Palacio de Bellas Artes en la Ciudad de México; el cerro de la Silla y el Parque Fundidora en Monterrey; el Parián, en Guadalajara; Chichén Itzá, en Yucatán; y el cerro del Tepozteco, en Tepoztlán; cada uno más fascinante que el anterior.
5. Por su inolvidable sabor
Nombrada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO, la gastronomía mexicana es una de las mejores del mundo y una de las principales razones para conocer México. Resultado de la combinación de la tradición prehispánica y colonial, los sabores de culturas de todo el mundo, la riqueza de la tierra y el mar, y la técnica y el talento de chefs y cocineros, el sabor de México es inigualable.
Cada región del país tiene sus propias especialidades, en ocasiones preparadas con ingredientes locales y francamente sorprendentes. Es imposible hacer una selección de los mejores platillos de la gastronomía mexicana por la gran diversidad que existe, pero si hay algunas preparaciones que son especialmente representativas por su valor y riqueza.
Estas son: el mole, el pozole, los tacos, las enchiladas, las quesadillas, los tamales, las tlayudas, el pescado a la veracruzana, los huaraches y los sopes, el pipián, la birria, el asado de puerco, los frijoles charros, las guacamayas, la barbacoa, las carnitas michoacanas, el cabrito, el chile en nogada y la cochinita pibil. Por supuesto, hay muchas variaciones de estos platillos, dependiendo de dónde se coman.
6. Por su ritmo
En México, la música es un estilo de vida. Sin importar a donde vayas, tendrás la oportunidad de escuchar algo distinto, de los mariachis de Jalisco a la banda sinaloense, los huapangos, los corridos, las rancheras, la norteña y los sones, de distintas partes del país.
Además de lo anterior, en México hay extraordinarios bailes típicos que muestran la gran riqueza cultural de las distintas regiones. Incluso, hay fiestas folklóricas como la popular Guelaguetza, en Oaxaca.
7. Por la pasión de su gente
En México, la pasión se vive de muchas formas. De los artesanos del barro en Oaxaca o de la plata en Taxco que con manos mágicas crean otros universos a los aficionados del futbol que dan todo por su equipo, a los jóvenes estudiantes que levantan su voz en marchas y manifestaciones, a los amigos que se juntan a cantar y brindar en las cantinas, los estudios de los artistas en San José del Cabo, y los guías de turismo que buscan preservar la naturaleza de forma sustentable y sostenible.
8. Por sus celebraciones, de las mejores razones para conocer México
Y como decía Octavio Paz, “El […] mexicano ama las fiestas y las reuniones públicas. Todo es ocasión para reunirse. Cualquier pretexto es bueno para interrumpir la marcha del tiempo y celebrar con festejos y ceremonias hombres y acontecimientos”. Aquí, siempre hay motivo para celebrar, tanto la vida como la muerte, una razón más para conocer México.
Además de las coloridas fiestas patronales y celebraciones religiosas que se hacen en todo el país, hay algunas fiestas que son especialmente importantes como la del 15-16 de septiembre (día de la Independencia) y el Día de Muertos (1 y 2 de noviembre).
9. Por su belleza única
México tiene una belleza especial y completamente distinta dependiendo de la parte del país que visites. Hay paisajes sorprendentes de origen natural, como el paisaje agavero de Tequila, Hierve el Agua con sus cascadas petrificadas o el Valle de los Monjes con sus peculiares piedras de 60 metros de alto. ¡Y ni se diga de los extraordinarios cenotes!
También hay sitios increíbles creados por el hombre, como el jardín surrealista de Edward James en Xilitla, el sitio arqueológico de Paquimé y el MUSA (Museo Subacuático de Cancún).
10. Por su gente
La última razón por la que hay que conocer México es, simple y sencillamente, por su gente. Los mexicanos somos amables, alegres y siempre dispuestos a ayudar al otro, sin importar si estamos en una gran ciudad o en un pintoresco pueblito.