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Túneles chinos en Mexicali, un insospechado tour por La Chinesca

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Hay kilómetros de túneles chinos en Mexicali, Baja California. En otra época fue construida una ciudad subterránea como refugio de inmigrantes chinos. Hoy es posible visitar algunas partes de La Chinesca gracias a un tour que parece salido de una película de suspenso.

Esta ciudad pasó ya por dos incendios, permaneció en el abandono por muchos años y se ha inundado con el paso del tiempo.

Sin embargo, siempre llegan cachanillas (mexicalenses) a reconstruirlo y restaurarlo, y así, contar parte importante de la historia y cultura de esta capital bajacaliforniana.

A principios del siglo xx, se asentaron en Mexicali más de 17mil chinos, la zona en donde habitaban era conocida como “el pequeño cantón”.

Actualmente, en el barrio chino de Mexicali, mejor conocido como La Chinesca, habitan alrededor de 30mil chinos, muchos de ellos son comerciantes y restauranteros, pero ya no viven en los túneles chinos en Mexicali.

Los sótanos estuvieron cerrados durante más de 50 años. No tienen acceso desde la calle, solo mediante algunos negocios de La Chinesca.

¿Cómo comenzó todo?

Entre 1908 y 1910, el presidente Porfirio Díaz autoriza a la Colorado River Company la construcción de una red de canales y trabajadores chinos llegan como mano de obra y como agricultores de algodón, ya que a principios de los años 20, Mexicali era la zona de mayor producción algodonera del mundo.

También, muchos de estos chinos huían expulsados de comunidades de Chihuahua, Sonora, Coahuila y Sinaloa, como parte de un movimiento de persecución que impedía que los chinos florecieran comercial y económicamente en México.

De la agricultura, los chinos establecen comercios, tiendas y restaurantes, acondicionando sótanos debajo de los negocios para refrescarse del calor tan característico de Mexicali.

Y así, comienzan a esparcirse en la zona y a traer consigo a más habitantes chinos sin documentos legales.

¿Cuándo y por qué se construyen los túneles chinos en Mexicali?

La persecución de los estados del norte llega a Mexicali y entonces, hubo que esconderse más o menos desde 1918 hasta 1950.

Y es así como los chinos crean un completo pueblo en el subterráneo, derribando paredes para armar una red de túneles debajo de los comercios.

Establecieron dormitorios, grandes cocinas, guarderías, cantinas, escuelas, un casino, tiendas, un hospital y hasta una prisión. 

También había fumadores de opio que se utilizaban (principalmente, dicen) para mitigar el cansancio por el arduo trabajo.

Sin embargo, no había luz eléctrica, se alumbraban con velas y lámparas y tenían pequeños respiraderos y tuberías que a la fecha llegan a reventarse, razón de las inundaciones.

En 1923, un incendio originado en un cine de Mexicali se extendió en todas direcciones, quemando casi en su totalidad restaurantes y comercios.

De los sótanos de los comercios salieron miles de personas tratando de salvar su vida.

Esta catástrofe sucedió el 23 de mayo de 1923. Quienes lograban salir de los sótanos eran chinos de todas edades, algunos tenían años sin ver la luz del sol.

La mayoría vivía en los sótanos interconectados de una zona denominada La Chinesca, sitio que tiene poco más de un año de llamar la atención de mexicalenses y viajeros, curiosos de conocer los mitos y leyendas del Barrio Chino de Mexicali.

Sin embargo, a pesar de la cantidad de víctimas, la comunidad china se sobrepuso y continuo adelante.

Pero hubo un segundo incendio en 1991. Pero para ese entonces, no habitaban más chinos en los sótanos.

Desde los años 50s, muchos de ellos regresaron a China, otros emigraron a Estados Unidos y los que se quedaron en México, pudieron legalizarse.

Otras historias que se cuentan sobre los túneles chinos

Se dice que en La Chinesca había un manicomio en el que eran encadenadas las personas con trastornos mentales graves o quienes “se portaban mal”.

No faltaban tanto los prostíbulos como los templos de oración.

También se cuenta que por uno de los túneles podían los chinos cruzar a Calexico, California, saliendo por un comercio al otro lado de la frontera con Estado Unidos.

El tour de los túneles chinos en Mexicali: La Chinesca

Es Rubén Hernández Chen quien se ha encargado de rescatar objetos y limpiar los pasillos de los túneles subterráneos de la Chinesca para hacerlos transitables para el turismo.

En el sótano de su tienda incluso improvisó un teatro donde además de presentaciones artísticas se proyectan documentales a cerca de la Chinesca y su historia.

Rubén tiene las raíces chinas de sus abuelos y lleva la mitad de su vida buscando reactivar el centro de la ciudad.

A través de documentales, un libro y recorridos turísticos, Rubén y su equipo trabajan en un proyecto turístico cultural para contar a los mexicalenses y a los visitantes, las historias de La Chinesca.

Es así como han recolectado cartas, fotografías y varios objetos de la época para poner en exhibición, además de gestionar los permisos para que estos sitios puedan ser visitados.

Por otro lado, los recorridos por los túneles de La Chinesca son otro aporte importante para difundir la importancia de la comunidad china en la historia de la ciudad.

¿Cómo, cuándo y dónde hacer el tour de La Chinesca?

Para conocer parte de los sótanos de La Chinesca y sus historias, vale la pena reservar el recorrido especializado.

Tiene una duración de 3 horas aproximadamente e inicia en la tienda El manicomio, ubicada enAv. Reforma 306.

Los tours tienen un costo de 150 pesos por persona y también incluyen un recorrido por edificios históricos de la ciudad.

Los fines de semana hay dos recorridos por día. Es importante solicitar el tour con anticipación al teléfono (686) 150 3694 o pide informes por Facebook/Origenes y Secretos de La Chinesca.

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