¿Qué hacer cuando estás triste? Viajar, para empezar
Tal vez te preguntas qué hacer cuando estás triste si ya lo has intentado todo. Sin embargo, tal vez todavía no pones en práctica una estrategia infalible: viajar.
Ahora que, si muestras algo de escepticismo sobre si viajar es una de las primeras cosas que tienes qué hacer cuando estás triste te daré la razón científica y automática.
La explicación biológica
Según la ciencia, al viajar, nuestro cerebro incrementa la liberación de dopamina, uno de los neurotransmisores más importantes de nuestro sistema nervioso.
Para no entrar en rollos e ir al grano, la dopamina, entre otras importantes funciones relacionadas con las emociones, la memoria y la personalidad, es el neurotransmisor del placer (Me lo contó el Doctor en Neurociencias Eduardo Calixto cuando le pregunté qué hacer cuando estás triste).
Si quieres saber más a cerca de las funciones de la dopamina tendrás una explicación fidedigna y más profunda aquí.
Sigamos…
Verte desde afuera
Cuando tienes un problema al que no le encuentras la solución más adecuada e incluso te quita el sueño, sufriste una pérdida (trabajo, pareja, la muerte de un ser querido, la juventud, etc) el panorama se vislumbra gris y poco claro.
Es difícil en ese momento decidir qué hacer cuando estás triste y el dolor se ha mantenido ahí por mucho tiempo, o por poco tiempo, pero resulta muy intenso o insoportable.
Una de las mejores cosas qué hacer cuando estás triste es viajar porque te permite verte desde afuera, pero no desde afuera de ti como si fueras un ente extraño.
Así, un viaje te deja verte desde fuera de tu hábitat cotidiano. Te aleja de las personas y las situaciones con las que estás en contacto a diario y te da un espacio suficiente para tomar decisiones con la cabeza fría.
Cuando sales de la cotidianidad, puedes ver los problemas o situaciones que te aquejan con ojos diferentes, un juicio más aterrizado, y sobre todo, le dedicas el tiempo a pensar en los pros y contras de tus decisiones.
Pero sobre todo, cuando estás de viaje en un sitio impresionante especialmente con un entorno natural hermoso, tal vez logres ver los problemas más pequeños, en comparación a la inmensidad del universo que te rodea.
La motivación, infalible para decidir qué hacer cuando estás triste
Ok, ya tenemos un fundamento biológico, pero digamos que no es suficiente, ya que es un hecho que para viajar, necesitamos al menos un poco de motivación, incluso antes que dinero u organización.
La motivación actúa como un filtro, aquí es donde puedes desistir, ya que si estás triste, es poco probable que te sientas motivado a viajar, y tendrás tus razones.
Sin embargo, aun con poca motivación, solo requieres voluntad para hacer un cambio y sentirte mejor, y eso, muchas veces solo pasa cuando te has cansado de la depresión y estás ya buscando qué hacer cuando estás triste pero ya no quieres estarlo.
Y es ahí, en ese momento cuando, sin importar el lugar de tu viaje, será solo cuestión de comprar un boleto de avión y reservar hospedaje, o aun mejor, elegir un destino en la naturaleza y tener lista tu tienda de campaña para dejarte llevar y darle un voto de confianza a tu próximo viaje.
Los beneficios psicológicos de viajar cuando estás triste
Puede ser que a éstas alturas aun dudes de que lo mejor que hay qué hacer cuando estás triste es viajar, o al menos, es algo que te ayudará mucho a darte un respiro y ver las cosas con otra perspectiva.
Tendrás tiempo para respirar profundo
Respirar profundo o suspirar, son técnicas simples y vitales, que ayudan a curar una depresión. Cuando respiras profundo antes de responder a otra persona, tienes el tiempo suficiente para pensar dos veces lo que dirás, y también sucede cuando tomas una decisión.
Estando de viaje, en silencio, con el teléfono celular lejos de ti, podrás darte el tiempo de aprender a respirar profundo, lo que al mismo tiempo va a relajarte.
Es una oportunidad para escribir
Otra de las cosas terapéuticas que hay qué hacer cuando estás triste es escribir. Se trata de un ejercicio muy sanador, que además te permite darte cuenta de cosas que no tienes tan claras .
Cuando viajes, lleva contigo una libreta que te guste y ocúpala. Date tiempo para escribir lo que piensas y sientes, y búscale congruencia con lo que estás haciendo al respecto.
También te será útil hacer una lista de planes o de estrategias para salir del mal momento.
Te da la idea de un “Reset”
Bien dicen que nunca regresamos de un viaje igual que cuando nos fuimos. Y es que un viaje puede tener el poder de “resetearte” o reiniciarte, de volver con otro ánimo y una nueva actitud para tomar al toro por los cuernos y darle una solución a tu problema.
Disminuye el estrés
El darle vueltas a una idea o a un recuerdo durante días, meses o años, genera una gran cantidad de estrés. Es como dar vueltas en el mismo sitio sin encontrar la salida.
Desde la planeación del viaje, ocupas tu mente en algo diferente que puede entusiasmarte más de lo que imaginas, y disminuir tu nivel de estrés.
Y prepárate para estar en tu destino, donde tenlo seguro, será necesario que te desconectes un poco del mundo exterior.
Te brinda la posibilidad de conocer nuevas personas
Hay quienes dicen que lo mejor que hay qué hacer cuando estás triste es socializar (aunque es muy respetable y también funciona que prefieras estar solo).
Siempre que viajas hay infinitas posibilidades de conocer nuevas personas, de darte cuenta de otros mundos e incluso agregar a tu vida nuevas amistades, y eso, si es algo que te gusta, siempre puede disminuir la tristeza.
Nutrir tus recuerdos positivos, algo qué hacer cuando estás triste
Para una persona son importantes los recuerdos, incluso, puede que los recuerdos del pasado sean lo que la tienen triste.
Sin embargo, este viaje aunque no lo estés haciendo en tu mejor momento, ten por seguro que te acumulará buenos recuerdos, y tal vez, te ayude a dimensionar la situación que te preocupa de otra manera.
Te enseñará un modo de vida más simple
Si decides irte de viaje, viaja ligero. Con poco equipaje, lo suficiente para no pasar incomodidades. Esto te será útil para darte cuenta que necesitas muy poco para estar contigo y estar en paz.
Créelo, lo mejor que hay qué hacer cuando estás triste, es viajar ligero, a donde sea.